El Cristianismo Católico Romano Apostólico, mejor conocido como Catolicismo, fue durante un larguísimo periodo de la historia del hombre la religión predominante en todo el mundo, el cual aunque vivió ciertos periodos de altibajos, supo mantenerse como la fe dominante en la extensa mayoría de naciones y, así pues, obtener una presencia terrenal de gran peso en el destino de la humanidad entera. Desde que Nuestro Señor Jesús predicase en Tierra Santa y dejase, por medio de sus apóstoles y seguidores, la semilla y la enseñanza de lo que es digno de Dios Padre, la historia de la humanidad parece haberse acelerado de tal modo que la Fe no sólo revolucionó corazones, sino a todas la civilizaciones directa e indirectamente. Las artes, arquitectura, filosofía y las Ciencias en general no hubiesen sido las mismas o, al menos, no hubiesen evolucionado al ritmo tan veloz por el que pasaron desde los últimos 2000 años...
Sin embargo desde sus origenes el catolicismo ha sido señalado y nunca ha estado falto de detractores y enemigos. Ya desde los tiempos mismos de Jesús, los judíos han sido enemigos de la Santa Doctrina que Nuestro Señor predicó, y sobran los pasajes del Nuevo Testamento en los que los judíos (también llamados como "serpientes") son nombrados como antitesis de la Fe católica; he aquí algunos muy significativos apenas en el Evangelio de San Mateo, el primer libro del Nuevo Testamento: Mateo 23:1-36, Mateo 27:25 y Mateo 26:3-4. Así pues el pueblo judío vive en la herejía no sólo por haber sido ellos los principales perpetradores de la Crucifixión de Jesús, sino porque viven negando su Resurrección (Mateo 28:11-15). Sin dar demasiadas vueltas con la "raza de la serpiente" sólo hace falta leer dos de sus textos más preciados y fundamentales: el zohar y el talmud, donde varios de sus pasajes son de lo más blasfemo, despreciable y controvertido.
Los otros enemigos del cristianismo católico son los islamistas, sobre todo los extremistas jihadistas de la agenda wahabista, que en el fondo es una subordinada del judaismo internacional. Pero bien nos educó Nuestro Señor en Mateo 12:24-30 sobre las divisiones internas y sus consecuencias, y he aquí que, también de la negra mano del judaismo internacional y sus aliados, el cristianismo, a partir de la llamada reforma luterana o protestante, se halla dividido. Si bien el Cisma entre Católicos Romanos-Apostólicos y Católicos Ortodoxos supusó una ruptura a gran escala por todo lo que significó en la esfera cristiana, fue por medio de los herejes reformistas que, tanto el Cristianismo Occidental como el Oriental vieron disminuida una parte considerable de su presencia en varias naciones.
Si bien ambas iglesias supieron resistir, la realidad es que, tras el judaismo intensificado de la pos-guerra, la influencia y alcance de los judíos se disparó como nunca antes gracias a dilemas y farsas políticas de "izquierda" y "derecha" consumadas por una "fiebre comunista" y un maligno capitalismo que terminaría por infiltrarse en la cultura popular de consumo y, por ende, en la cultura general de distintas naciones. En los EUA, donde los judíos han erigido su nido de serpientes en Occidente, al saber que la mayoría de habitantes profesaban el cristianismo hereje nacido de la reforma protestante, se movilizarón para deformar también las escrituras gracias a la financiación de la biblia scofield, como puede leerse en este texto, por cierto, algo díficil de encontrar en internet de buenas a primeras...
El "evangelismo" fue exportado hacia los países católicos, principalmente de México hacia abajo, incluyendo Brasil, y al otro lado del Atlántico, en España, como una respuesta de los enemigos de Cristo hacia la Doctrina Social y Económica de la Iglesía Católica que tomó relevancia a mediados del siglo pasado cuando comenzó a rescatarse el pensamiento del Rerum Novarum cuya enseñanza es profundamente contraria contra el comunsimo ateo y el capitalismo individualista. Testigos de jehova, baptistas, cristianos no confesionales, etc., comenzarón a surgir por todos estos territorios, y aunque México, el país de habla hispana con mayor número de católicos supo resistir gracias a su "naturaleza" cristera, Brasil ha ido sucumbiendo a esta herejía. Así pues, tras el Vaticano Segundo, los enemigos de la iglesia han encontrado más fácil el acceso a Roma, siendo común desde entonces la visita de judíos, protestantes, islamistas y otras religiones paganas en la Santa Sede.
Pero como lo ilustró de gran manera el genial Chesterton, "El cristianismo ha muerto muchas veces y ha resucitado de nuevo; pues tiene un Dios que conocía el camino fuera de la tumba", así parece ser que hoy día se vive un "renacimiento" cultural del catolicismo entre los jovenes, quienes sapientes de los hechos pasados comienzan a cuestionarse el status quo de la llamada "modernidad". Si bien en la anglosfera, la mayor parte de esta toma de conciencia cristiana sigue arraigada al cristianismo protestante, hay un importante número (aunque aún reducido) de jovenes que se acercan o al catolicismo o a la ortodoxia. Cabe decir que esta (nueva) iluminación católica es también responsiva y reaccionaria, y en muchos círculos incluso armada.
Lo que quiero dejar en claro es que la moral propia del catolicismo es por mucho superior a la moral de sus enemigos, pues ya en Mateo 7:16-20 se habla de los frutos (resultados, acciones) y de cómo el bien produce frutos de bien y el mal frutos de mal, así la Santa Iglesia Católica ha producido frutos de bien en abundancia e, incluso a pesar del tropiezo que ha significado el Vaticano Segundo y a la presencia de sus vastos enemigos, los sigue produciendo, y el Señor, su Hijo y el Espíritu Santo saben de ello, pues son sabios y así también sus respuestas, pues mientras el reformismo hizo aparecer una lista en la puerta de una iglesia, el catolicismo se hizo presente por medio de la Santísima Virgen María de Guadalupe.
¡Viva Cristo Rey y la Santísima Virgen María de Guadalupe!